En el cielo faltaba un bandoneon.....................................

Buenos Aires, tiene la dulce melancolia de la partida y tambien el inexplicable aroma del encuentro. Y sobre sus calles hoy teñidas de bocinazos y piquetes, se esconde tambien la melodia fina de un tango que alguna vez fue sinfonia de arrabal. Y en los ultimos tiempos hemos perdido solamente fisicamente algunos de sus mas altos exponentes de la musica ciudadana, ejemplo claro el Polaco Goyeneche, Pero en estas horas nos dejo tambien El Negro Ruben Juarez, tipico exponente de un barrio tan lejano en el tiempo como cercano en la añoranza, la esquina del cafe, las noches de timba interminable el bandoneon de Pichuco Troilo, el solemne encanto de Enrique Dumas y tantos mas que son nuestros para siempre. Las biografias a la hora de la partida, suenan a mi entender odiosas e injustas, por datos que se agregan sin certeza o simplemente se olvidan por que no suman, sin embargo EL Negro, hizo honor al malevaje extrañao y pudo luchar contra todo y a favor de el para zafar de la mueca dolorosa de su destino final. Gracias Negro por tu musica, por tus codigos de bien, por tu bandoneon hijo dilecto de tu vida y sobre todo porque creo que nunca renunciaste a ser vos mismo, es decir la fidelidad mas respetada. Fuiste a completar la orquesta de un cielo con sabor a tango, seras bien recibido, a Dios le hacemos este encargo, un beso grande para tu gente.Ah, perdoname te llamaron antes, porque en el cielo faltaba un bandoneon..........